TENSIONES ENTRE SOCIALISTAS (PSC FRENTE A PSOE) POR CULPA DEL TC

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Montilla intenta abrir una crisis en el Grupo Socialista del Congreso para renovar el TC

YOLANDA CARDO / ANGUERA / M. CALLEJA BARCELONA / MADRID
El presidente de la Generalitat, José Montilla, movió ayer ficha convocando a las fuerzas políticas catalanas a un frente común en defensa del Estatuto. Un frente común que los socialistas catalanes amenazan ahora con llevar al Congreso de los Diputados, lo que sería tanto como romper por primera vez la disciplina de voto en el Grupo Socialista y que los 25 diputados del PSC voten junto a CiU, ERC e ICV para reclamar una renovación del Tribunal Constitucional (TC) a la que José Luis Rodríguez Zapatero se opone.
Montilla no oculta su enfado por el cambio de discurso del PSOE personificado el lunes por el ministro de Fomento, José Blanco, que se alineó con las tesis del PP después de que Zapatero se comprometiera con el presidente autonómico el viernes a estudiar la renovación que reclaman desde el PSC. Y la respuesta se escenificó ayer con la misiva remitida al presidente del Parlamento catalán, el republicano Ernest Benach, en la que anuncia una ronda de contactos con los líderes de CiU, Artur Mas; ERC, Joan Puigcercós; e ICV, Joan Herrera, para pactar una resolución conjunta en la que se exigirá de nuevo la renovación del Alto Tribunal antes de dictar sentencia sobre el Estatuto catalán. Una ronda de la que Montilla excluyó al PP, al que considera responsable de la situación por mantener el recurso contra el Estatuto, y a Ciudadanos (C´s), que también cuestiona la constitucionalidad del texto.
En su misiva, a la que tuvo acceso ABC, Montilla advierte -«con todo el respeto institucional»- que ha llegado el momento «de decir que ni Cataluña ni España deben soportar una nueva fase de desgaste y descrédito de una de las instituciones más relevantes de nuestro sistema político». Y cuestiona que el TC «con su composición actual, esté en condiciones de trabajar con normalidad».
El presidente catalán se circunscribió tanto en la carta como en su intervención inicial durante la reunión del Gobierno catalán a «una resolución en el Parlamento» autonómico, pero el consejero de Política Territorial y portavoz «ad hoc», Joaquim Nadal, abrió la puerta a la posibilidad de trasladar ese frente común al Congreso. Una opción exigida como primera condición desde CiU, pero a la que hasta ahora se habían resistido los socialistas catalanes en otras batallas, como la de la financiación autonómica.
Nadal abrió la puerta a una rectificación en la postura del Gobierno durante la sesión de control parlamentario a Zapatero. De hecho, el presidente tendrá que hacer un diagnóstico público de la situación del Constitucional, puesto que el líder de ICV ya ha anunciado su intención de reclamar a Zapatero «que haga todo lo posible para que el Tribunal se renueve».
Ofensiva de CiU
En el Congreso, el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, explicó las cuatro medidas que quiere impulsar su grupo parlamentario. En primer lugar, pretende sacar adelante en el Parlamento catalán un requerimiento de incompetencia al TC. También va a pedir la recusación de los miembros de este Tribunal que tienen su mandato caducado, por entender que no cumplen las condiciones de idoneidad para ser miembros de este órgano.
En el Congreso, presentará una modificación de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional para incorporar mecanismos que favorezcan la modificación de los miembros del Tribunal Constitucional en un plazo máximo de seis meses. Una iniciativa similar salió derrotada recientemente en el Parlamento, gracias a los votos en contra del PP y del PSOE, que en este asunto se entendieron a la perfección. Ahora CiU no quiere que sean los grupos quienes registren la iniciativa, sino los diputados catalanes. Además, CiU propondrá más adelante otra reforma legislativa basada en la «doctrina Pérez Royo», según la cual el control de constitucionalidad de los estatutos de autonomía no tiene base constitucional. Hoy, en la sesión de control, Duran preguntará a la vicepresidenta De la Vega sobre la situación actual del Tribunal Constitucional.
Desde el Grupo Popular, su portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría, recordó que está pendiente una Proposición de Ley sobre el recurso previo de inconstitucionalidad, que impediría la entrada en vigor de los estatutos que tengan presentado un recurso. Por el PSOE, José Antonio Alonso tachó de «virtuales» las propuestas de CiU sobre el TC: «No hay más alternativa que respetar las leyes y las instituciones en un Estado de Derecho».